Ciudadana denuncia reforma fiscal en vistas públicas: «Viola todos los artículos de la Constitución»
Reportaje de Alcarrizostv
En un tenso intercambio durante las vistas públicas sobre la propuesta de reforma fiscal, celebradas en la Cámara de Diputados, la ciudadana María Inmaculada Núñez elevó su voz para manifestar un fuerte rechazo a la iniciativa del Gobierno. La intervención de Núñez se destacó por su contundencia, al denunciar que el proyecto viola «todos los artículos de la Constitución» y advertir sobre las posibles consecuencias sociales que podría generar.
La propuesta de reforma, que el Gobierno ha presentado con el objetivo de incrementar los ingresos fiscales y reducir el déficit presupuestario, ha sido recibida con escepticismo y oposición por diversos sectores. Durante su intervención, Núñez no dudó en calificar la reforma como una «irresponsabilidad macroscópica» y lanzó una dura advertencia a los legisladores y al Ejecutivo. «Dejen de provocar al pueblo, para que no les salga el diablo porque les va a salir el demonio», expresó.
La declaración provocó reacciones mixtas en el auditorio. Algunos asistentes aplaudieron las palabras de Núñez, mientras que otros, en particular los funcionarios y representantes del Gobierno, manifestaron su desacuerdo con la postura. Las vistas públicas, que buscan recopilar las opiniones y sugerencias de diversos sectores de la sociedad antes de proceder con la discusión del proyecto de ley, han servido como un escenario para que voces críticas como la de Núñez se hagan escuchar.
La reforma fiscal ha sido un tema polémico desde que se filtraron los primeros detalles. Según expertos en materia económica, el plan contempla ajustes en los impuestos sobre el consumo, la eliminación de ciertas exenciones y un incremento en las tasas para productos considerados no esenciales. Sin embargo, críticos han argumentado que la reforma afectará desproporcionadamente a la clase media y a los sectores más vulnerables de la sociedad, al tiempo que no aborda adecuadamente los problemas de evasión fiscal y gasto ineficiente del Gobierno.
Por su parte, el Gobierno ha defendido la propuesta, argumentando que es necesaria para garantizar la sostenibilidad fiscal del país y poder cumplir con los compromisos internacionales. Según las autoridades, las reformas son indispensables para corregir desequilibrios en las finanzas públicas, mejorar la recaudación tributaria y asegurar recursos para áreas prioritarias como la educación, la salud y la seguridad social.
Sin embargo, las palabras de Núñez han puesto de manifiesto el creciente descontento de algunos sectores de la sociedad, que ven la reforma como una carga adicional para quienes ya enfrentan dificultades económicas. Organizaciones sociales y grupos de activistas han advertido que, de aprobarse la reforma sin modificaciones significativas, podrían aumentar las protestas y movilizaciones en las calles.
El debate sobre la reforma fiscal continúa en la Cámara de Diputados, donde se espera que los legisladores consideren las inquietudes presentadas durante las vistas públicas. Mientras tanto, el país observa de cerca el desenlace de una iniciativa que, para algunos, podría marcar un punto de inflexión en la relación entre el Gobierno y la ciudadanía.