Ningún primer mandatario, independientemente de sus ejecutorias, popularidad o aceptación de su gestión tiene tiempo ni está en la obligación de participar en el montaje de actividades provinciales.
Eso corresponde única y exclusivamente al liderazgo local, el cual debe tener en sus manos las herramientas para concitar el apoyo del electorado y la población en sentido general y copar las actividades oficiales.
Cuando una actividad provincial fracasa es un reflejo del rumbo que lleva el gobierno, en una zona determinada, pero también del rechazo que tiene la gente hacia sus líderes locales.
En el día de ayer el Presidente Luis Abinader estuvo inaugurando algunas obras en la provincia (Montecristi) y desde mi punto de vista la presencia oficial no se sintió y las actividades no tenían el aura esperada.
Los funcionarios y autoridades institucionales del partido (Presidente Provincial y Gobernadora, principalmente) deberían sentarse a reflexionar que sucede en ese sentido.
Yo estoy seguro que el primer mandatario no está contento.
Daygorod Fabián Sánchez