Por Juan Popa Sanchez
Este miércoles, la zona costera de Santo Domingo, especialmente en la avenida España y el Malecón, ha experimentado un fuerte oleaje como consecuencia del reciente paso del huracán Beryl.
Este fenómeno natural, clasificado como huracán de categoría 4, pasó a más de 300 kilómetros de Santo Domingo, pero su impacto en el mar se ha hecho sentir con fuerza.
El mar está bravísimo, y a pesar de las advertencias, muchas personas continúan circulando y acercándose a la costa. A menudo, estas situaciones resultan en lamentos y comentarios de que los fenómenos son inevitables o «bíblicos». Sin embargo, es crucial recordar la importancia de seguir las indicaciones de seguridad para evitar tragedias.
